Estamos en un ficticio fin del siglo XIX en un ficticio Oeste de America. Hace unos años que los hombres blancos vienen de lejos a hacer fortuna, de unos modos mas o menos licitos. Basandose en tejemajes, engaños y la falta de ley o intencion de ser minimamente justos con los nativos residentes, los colonos se van expandiendo de este a oeste. Armados y armas y contratos que solo les benefician a una parte, huyen de la vieja europa buscando una vida mejor, u oro, o lo que puedan obtener. Su periplo va chocando con los nativos, muchas veces violentamente. Unas veces mueren unos, otras veces los otros, pero poco a poco los invasores van colonizando las tierras, avanzando por el deesierto y acabando con las tribus. Siempre vienen mas colonos, y cada vez mejor armados y con peores intenciones. Esta situacion lleva a los supervivientes de unas de las tribus expulsadas de sus tierras natales a llevar a cabo unos rituales prohibidos, oscuros y desesperados. El viejo shaman que lo realiza sabes que puede ser el fin para las tierras en las que se expanda la oscuridad que pretende invocar. Su intencion es rasgar el velo entre el mundo material y el de los espiritus. Dejará entrar a todo lo que hay alli para que frenen y quizas con algo de suerte, acaben con el hombre blanco. Suplicará a los ancestros que le ayuden, que den justicia y si no, venganza. Que se lleven las almas de los rostros palidos. Y si es necesario, que se queden las tierras en las que una vez vivieron. La herida abierta en la realidad creo una oleada de oscuridad, no vida y odio hacia todo lo vivo, no solo los hombres blancos. Y los espirtus venidos necesitaban un 'hogar' en este mundo, carne que habitar. Todo lo que entró estaba lleno de maldad, resentimiento y odio tras años de vagar y sufrir en el mas alla, sin lugar al que dirigirse, atrapados en ese infierno del que ahora podian escapar. Solo fueron unos segundos lo necesario por parte del viejo shaman para darse cuenta de su gran error y de que eso que entraba no atendia a sus suplicas contra el hombre blanco, y los nativos tambien estaban en peligro, asi que dio su vida cerrando la grieta. La miasma ponzoñosa se esparcia como humo en el viento, siendo mas densa y oscura donde se acumulaba y mas fina y casi invisible al esparcirse. Esa oscuridad era un ente en si, sin razocinio comprensible para el hombre, pero con conocimiento de si mismo, de sus limitaciones y necesidades, y sobre todo, de como alimentarse de las almas de aquellos que encontraban. Los que poseian una gran maldad y oscuridad interior atraian y arremoliban esa oscuridad, que los premiaba y potentiaba haciendo de ellos una baliza, un ancla, un punto sobre el que afianzarse y hacerse mas fuerte. Sin saber porque, se expandio de norte a sur, con mas concentracion y poder en su inicio, consumiendo la vida y habitando la carne encontrada, retornciendola y mutandola a su imagen y semejanza. Se creo una zona de muerte y oscuridad como una herida de norte a sur, que ondulaba expandiendo y contrayendo sus zarcillos en busca de mas almas, de oeste a este. Pronto llegaron noticias a las ciudades mas al este de muertos que andan y seres retorcidos que diezmaban las poblaciones mas al oeste. De aberraciones inmensas y espectros